La fotografía del atentado contra el Candidato Donald Trump, ensangrentado pero desafiante, con la mano empuñada, ha generado zettabytes de información en todo el mundo. Esta imagen quedará profundamente en la conciencia pública y ha sido comparada con momentos icónicos de anteriores presidentes de Estados Unidos.

Durante un evento público en Pensilvania, el temerario Thomas Mathew Crooks escaló una bodega, se puso pecho a tierra y, a 134 metros de distancia del candidato presidencial, apuntó su rifle y disparó diversas ocasiones, infligiendo una herida en el hélix, parte superior del pabellón auricular de Trump.

Las imágenes del ataque se propagaron como una reacción en cadena en las plataformas digitales, y la subsecuente respuesta del polémico expresidente conmocionó al mundo en cuestión de minutos, liberando una onda de energía cargada de reacciones que reforzaron la imagen mediática de un hombre fuerte y con aplomo ante la adversidad.

En el tumulto de una jornada decisiva, donde el destino de una nación pendía de un hilo, nació una fotografía que quedará grabada para siempre en la memoria colectiva. Los fotógrafos Evan Vucci, ganador del Premio Pulitzer, y Doug Mills, del New York Times, ambos observadores perpetuos del mundo y sus eventos, se movieron con precisión entre el caos. Ambos capturaron la esencia del suceso. La fotografía que documenta el momento exacto en que Trump, a pesar de sus heridas visibles, se levantó con el rostro ensangrentado y, segundos después, levantó el puño en alto, gritando "¡Fight! ¡Fight! ¡Fight!" se ha convertido en una imagen épica. Este instante ha sido inmortalizado y comparado con otras imágenes históricas que simbolizan determinación.

La imagen de valentía ilustrada en diversas pinturas del primer presidente de Estados Unidos, George Washington cruzando el río Delaware, es un símbolo de liderazgo en tiempos de adversidad.

Otro momento histórico es el celebre discurso de Abraham Lincoln en Gettysburg, uno de los más recordados y citados de la historia de Estados Unidos, simbolizando la lucha por la unión y la libertad.

Recordemos el poderoso discurso "I Have a Dream" de Martin Luther King Jr. en Washington D.C., un hito en la lucha por los derechos civiles. La comparación de Trump con MLK es controvertida, pero para sus seguidores, su llamado a defender la libertad simboliza una lucha por la visión de un futuro mejor.

No podemos olvidar el inspirador llamado a la acción "Ask Not What Your Country Can Do for You…" de John F. Kennedy, que despertó el interes para volcar a toda una generación para poner un hombre en la luna.

El ícono que resonó en todo el mundo fue la demanda de inspiración, "Tear Down This Wall", hecha por el presidente estadounidense Ronald Reagan para derribar el muro de Berlín, simbolizando una victoria contra el comunismo y la opresión.

La fotografía de Trump, ensangrentado pero desafiante, se ha convertido en un símbolo potente para su base, proyectando la imagen de un líder dispuesto a luchar hasta el final por sus ideales. A pesar de las controversias que rodean su figura, este momento ha dejado una huella indeleble en la memoria historica política de Estados Unidos y del mundo entero.

Si el atentado contra Ronald Reagan en 1981 le dió 22 puntos al alza en las encuestas, ¿cuántos puntos le dará este atentado a Donald Trump?
La pregunta mata.